El aumento de la temperatura del agua del Pacífico es uno de los factores que pudo influir en la muerte de 240 tortugas golfinas, cuyos cadáveres aparecieron hace un mes en las playas mexicanas de Acapulco y Costa Grande (Guerrero), señalaron ayer fuentes de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.La semana pasada otras cuarenta tortugas de la misma especie, abundante en México, aparecieron muertas en Barra Vieja, también en las cercanías de Acapulco, aunque todavía no se cuenta con ningún diagnóstico acerca de su fallecimiento.
El dictamen sobre una de las tortugas muertas hace un mes, realizado por la Facultad de Veterinaria de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y al que hoy tuvo acceso Efe, establece que las lesiones de sus órganos derivan de la presencia de un hongo del género Paecilomyces spp.
Este agente está presente en multitud de entornos, incluso en los hogares, y no tiene porqué resultar nocivo.
Pero sí constituye un peligro para la vida de organismos cuyas defensas estén debilitadas.
Uno de los factores que contribuye a la inmunodepresión de las tortugas golfinas es el calentamiento del agua, asegura el informe de la UNAM.
La tortuga analizada, una hembra, presentaba afecciones de hígado y riñón (hepatitis y nefritis), así como congestión en el bazo, una neumonía moderada y calcificación en el corazón, entre otros males.
La falta de alimento o la temporada de anidación son dos circunstancias que también pueden hacer de los Paecilomyces spp hongos especialmente nocivos para estos animales, señala el dictamen de la UNAM.
Respecto a las últimas tortugas que aparecieron, Miguel Ángel Licea, de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, indicó que aún se esperan los resultados del estudio y las consultas con especialistas en esta especie.
Los factores determinantes pueden ser muchos, "como el cambio de las corrientes, entre otras cosas", dijo.
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